Los dos atesoran razones suficientes para encontrarse entre estos 52 destinos de viaje elegidos por el prestigioso diario The New York Times para este 2025 que comienza, si bien como es lógico la competencia es enorme y difícil. Y, por lo tanto, hacerse un hueco entre una lista que tampoco es particularmente extensa (el mundo es muy basto) y que llega en esta ocasión a su vigésima edición no es fácil. Montserrat lo hace, especialmente coincidiendo con el milenario de la abadía; y Canfranc, estación de tren de Aragón, lo logra tras una proceso amplio y profundo de rehabilitación e incluyendo novedades más que notables. Por cierto, sobre ambas hemos hablado en EV en los últimos meses de 2024.
El singular espacio natural del monasterio benedictino de la provincia de Barcelona descrito por el rotativo como cimas que se elevan hacia el cielo recordando «dedos que invitan a los peregrinos de todo el mundo» y su gran tradición e historia y significación reseñable tanto en Catalunya como más allá hacen que su presencia en dicho listado esté más que justificada. No obstante, el peso de una efeméride de tal magnitud -la celebración de una historia de mil años, en el caso de la abadía- y todo el calendario de actividades organizadas alrededor de dicha fecha durante este 2025 han tenido mucho que ver. Pese a ello su posición en dicha clasificación es algo rezagada: aparece en el puesto 48.
Bastante más arriba (nº 24) lo hace la Estación de Canfranc, convertida desde hace un tiempo también en un alojamiento de primer orden, con un hotel de gran lujo y que también cuenta con un vagón transformado en restaurante. Y no uno cualquiera: partiendo de la cocina aragonesa ya ha alcanzado altas cotas como atestigua la Estrella Michelín que acredita su gran desempeño. Canfranc, antigua estación ferroviaria de interesante y sensible historia -especialmente para aquellos con inquitudes por la Segunda Guerra Mundial-, se ubica en la frontera entre Francia y España, cercana a Jaca y con épocas de esplendor, sobre todo durante las décadas de los años treinta y cincuenta; aunque también con fases serias de inactividad debidas en especial a contextos geopolíticos adversos que no la favorecieron. Dejó de funcionar a comienzos de 1970.

El listado, para aquellos interesados, incluye del entorno europeo, y entre otros, destinos viajeros como: en Italia, Milán, las Dolomitas o las rutas en bici por la Sicily Divide; en Francia y coincidiendo con el Año Cezanne, Aix-en-Provence, en Alemania, Hamburgo; o en los Países Bajos, Ámsterdam y Rotterdam. Algunos, por lo tanto, más o menos previsibles, y otros más inesperados aunque justificados por celebraciones especiales. En este último capítulo se incluye y además encabeza este listado en el primer puesto, un recorrido por el suroeste de Inglaterra, siguiendo los pasos de Jane Austen de quien se celebra este año el 250 aniversario de su nacimiento.
Del resto del mundo y haciendo un repaso a los diez primeros: en segundo lugar aparecen las Islas Galápagos (Ecuador), el tercer puesto es para los museos de Nueva York mientras el cuarto es para el estado índio de Assam. Y cierra estos cinco primeros puestos, Tailandia. Groenlandia es justo la siguiente, Aix-en-Provence (Francia) la séptima y el imponente paraje natural del Sun Valley, en Idaho (Estados Unidos), el octavo. Lumbini, en Nepal, ocupa el noveno lugar y cierra este exclusivo grupo de diez la ciudad australiana de Sidney.
Algunos destinos, por lo tanto, son bastante originales, a los que añadir otros por descubrir y que es probable que no se encuentren entre las prioridades de muchos viajeros, como la ciudad japonesa de Toyama, el río Magdalena (en Colombia) o la población georgiana de Kutaisi.
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